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México

Sismos en octubre: ¿Por qué no sonó la alerta sísmica en CDMX este domingo?

El evento sísmico se produjo justo un día después de que un temblor de magnitud 5.0 en Guerrero también se sintiera en CDMX, despertando la creencia de qué octubre podría ser el nuevo septiembre.

Mapa de la CDMX y letras de Xochimilco.   Foto: Especial
Mapa de la CDMX y letras de Xochimilco. Foto: Especial

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Por: Marco Delgadillo

CIUDAD DE MÉXICO. - Este 13 de octubre, el Servicio Sismológico Nacional (SSN) informó sobre un sismo de magnitud 2.2 con epicentro al sur de la alcaldía Xochimilco, en la Ciudad de México (CDMX). A pesar de la corta percepción del movimiento en algunas zonas como Tlalpan y Xochimilco, la alerta sísmica no se activó, lo que ha generado cuestionamientos entre los capitalinos.

El evento sísmico se produjo justo un día después de que un temblor de magnitud 5.0 en Guerrero también se sintiera en la capital. Este segundo sismo, aunque de menor magnitud, ha causado interés no solo por la cercanía temporal con el anterior, sino porque se registró en octubre, un mes que parece desafiar la creencia popular sobre los sismos que suelen ocurrir en septiembre.

 

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Sismo sacude la CDMX en octubre: ¿Por qué no sonó la alerta sísmica?


¿Por qué no sonó la alerta sísmica?

La activación de la alerta sísmica depende de una serie de factores específicos. De acuerdo con el Sistema de Alerta Sísmica Mexicano (SASMEX), esta no se activa en casos de sismos con características similares al ocurrido en Xochimilco por las siguientes razones:

  • Magnitud baja y energía insuficiente: Con una magnitud de solo 2.2, el sismo no alcanzó los niveles de energía necesarios para detonar la alerta. El sistema está diseñado para activarse ante movimientos que representen una amenaza real para la integridad física de las personas o la infraestructura, lo cual no fue el caso en esta ocasión.
  • Epicentro superficial y local: El temblor de Xochimilco fue clasificado como un evento 'cortical' debido a su foco muy superficial. Estos sismos tienden a generar una percepción intensa pero limitada geográficamente. Aunque fue sentido en algunas zonas cercanas al epicentro, como las colonias al sur de San Miguel Topilejo, no tuvo un impacto lo suficientemente amplio como para activar la alerta.
  • Tiempo de respuesta insuficiente: El Sistema de Alerta Sísmica está diseñado para detectar sismos con epicentros alejados de la Ciudad de México, como los que ocurren en Guerrero o en la costa del Pacífico. En casos como el de Xochimilco, donde el epicentro está dentro de la ciudad, el tiempo entre el inicio del sismo y su percepción es muy corto, lo que hace inviable la emisión de una alerta temprana.

Además, según aclaraciones de la plataforma SkyAlert y el proyecto Sismo Alerta Mexicana, el sismo de Xochimilco no está relacionado con otras fallas, como la que atraviesa Mixcoac, lo que sugiere que es un fenómeno aislado y de baja preocupación.

 


¿Por qué tiembla en octubre y no en septiembre?

México tiene una historia de grandes sismos en el mes de septiembre, lo que ha alimentado la creencia de que es un mes particularmente sísmico. Sin embargo, eventos recientes, como el temblor de este fin de semana en Guerrero y el de Xochimilco este 13 de octubre, demuestran que los sismos pueden ocurrir en cualquier época del año. Los expertos del SSN insisten en que no existe un patrón específico que relacione los sismos con un mes en particular.

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¿Qué hacer en caso de un sismo mayor?

A pesar de que la alerta no se activó, es importante que los ciudadanos se mantengan preparados. En caso de un sismo de mayor magnitud, se recomienda:

  • Conservar la calma y ubicarse en zonas seguras, alejadas de ventanas y objetos que puedan caer.
  • Tener un plan de evacuación claro, identificando las rutas de salida más seguras.
  • Contar con una mochila de emergencia, que incluya agua, alimentos no perecederos, linterna, y botiquín.
  • Revisar constantemente la estructura de su vivienda para asegurar que esté en condiciones óptimas ante un sismo fuerte.

La Ciudad de México, ubicada en una zona altamente sísmica, seguirá siendo vulnerable a movimientos telúricos de diversa magnitud. La clave está en la preparación constante y el uso eficiente de las herramientas de alerta, que, en este caso, no fueron necesarias debido a la poca peligrosidad del evento.

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