SSC desmantela chelerías en el Eje 1 Norte: Así aplica la nueva reforma en CDMX
La prohibición de las chelerías en la Ciudad de México es parte de una estrategia más amplia para mejorar el orden en el espacio público y garantizar la seguridad de los ciudadanos.
CIUDAD DE MÉXICO. - En un esfuerzo por regular el consumo de alcohol en las calles de la Ciudad de México, las autoridades capitalinas han intensificado los operativos contra las conocidas 'chelerías', pequeños puestos que venden bebidas alcohólicas de manera informal en la vía pública.
Esta medida se tomó luego de la aprobación de una reforma a la Ley de Cultura Cívica que prohíbe la venta de alcohol fuera de los establecimientos formales y eventos autorizados, con el fin de combatir la proliferación de estos negocios irregulares y mejorar la seguridad pública.
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¿Qué pasó en el operativo contra chelerías en el Eje 1 Norte?
El reciente operativo, llevado a cabo por la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) en coordinación con la Subsecretaría de Programas de Alcaldías y Reordenamiento de la Vía Pública, resultó en el desmantelamiento de tres chelerías que operaban de manera ilegal en el Eje 1 Norte, una zona conocida por la presencia de comercio informal.
La acción fue anunciada en redes sociales por la Subsecretaría, que destacó que se continúan realizando recorridos constantes para identificar y clausurar estos puntos de venta.
Estos operativos son una muestra del compromiso del gobierno local para aplicar las nuevas normativas, que buscan regular la venta y el consumo de alcohol en la vía pública. La proliferación de chelerías, particularmente en zonas de alta concurrencia, ha sido una preocupación constante debido a los problemas de seguridad que se asocian con el consumo descontrolado de alcohol en estos espacios.
¿Por qué ahora están prohibidas las chelerías?
El detonante de esta acción fue la reforma aprobada en octubre de este año por el Congreso de la Ciudad de México, que modificó la Ley de Cultura Cívica para establecer sanciones claras contra la venta de bebidas alcohólicas en la vía pública. Con 62 votos a favor, se establecieron excepciones a esta norma solo en el caso de ferias, romerías o festividades autorizadas por las autoridades correspondientes.
Las sanciones impuestas a quienes infrinjan esta normativa son significativas: las multas económicas oscilan entre 21 y 30 Unidades de Medida y Actualización (UMA), lo que equivale a entre 2,171 y 3,257 pesos, o bien, los infractores pueden enfrentar arrestos de entre 25 y 36 horas, o la obligación de realizar entre 12 y 18 horas de trabajo comunitario.
Además, en caso de reincidencia, los propietarios de establecimientos que hayan sido clausurados y continúen operando ilegalmente enfrentarán penas mucho más severas, que incluyen de seis a 12 años de prisión y multas de hasta 5 mil días de salario.
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¿Por qué prohibieron las Chelerías?
La prohibición de las chelerías responde a varios factores relacionados con la seguridad pública y la salud. Estas pequeñas estructuras informales se han multiplicado en diferentes zonas de la capital, especialmente en áreas turísticas y de alto tránsito, generando diversas problemáticas.
Entre las razones principales para su prohibición están:
- Inseguridad y violencia: La venta y consumo de alcohol en espacios no regulados ha sido asociada con un aumento de la delincuencia, el desorden público y la violencia en las calles.
- Descontrol en el consumo de alcohol: En las chelerías no existen mecanismos efectivos para regular el consumo responsable, lo que facilita que menores de edad puedan acceder a bebidas alcohólicas.
- Impacto en la economía formal: Los comerciantes informales que venden alcohol evitan los impuestos y normativas que los negocios formales deben cumplir, generando una competencia desleal.
- Afectaciones a la convivencia ciudadana: Las chelerías generan problemas de convivencia debido a los altos niveles de ruido y la ocupación de espacios públicos.
¿A quiénes afecta la prohibición de las chelerías?
Aunque la prohibición de chelerías ha sido bien recibida por algunos sectores que ven en esta medida una oportunidad para mejorar la seguridad y la convivencia en la ciudad, también ha generado críticas por parte de quienes consideran que limita la economía informal, de la cual muchas personas dependen para subsistir.
En ese sentido, las autoridades han subrayado que no se trata de eliminar tradiciones o festividades populares que incluyen el consumo de alcohol, como las romerías o ferias, sino de regularlo adecuadamente para evitar excesos y asegurar que estas actividades se desarrollen dentro de un marco legal.
La prohibición de las chelerías en la Ciudad de México es parte de una estrategia más amplia para mejorar el orden en el espacio público y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Sin embargo, también plantea el reto de cómo balancear el derecho al trabajo de los vendedores informales con la necesidad de mantener una ciudad más segura y regulada.
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