Lo mejor de la información de Ciudad de México, el país y el mundo
Facebook POSTA header X POSTA header Instagram POSTA header Youtube POSTA header TikTok POSTA header
Media

La Piñata

México ha sido la piñata favorita de Donald Trump, el ahora Presidente electo de Estados Unidos ha vuelto a la carga más intensamente que cuando estaba en campaña.

Publicado el

Por: GREGORIO MARTÍNEZ

SAN PEDRO GARZA GARCÍA, Nuevo León.- México ha sido la piñata favorita de Donald Trump, el ahora Presidente electo de Estados Unidos ha vuelto a la carga  más intensamente que cuando estaba en campaña.

Y lo ha hecho con amenazas recicladas. Que continuará la construcción del muro fronterizo. Que aplicará aranceles mientras no logremos controlar el tráfico de drogas y de migrantes. Y en estos últimos días Donald Trump confirmó que declarará a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas extranjeras. Ya lo esperábamos. A finales de noviembre, republicanos cercanos al mandatario electo revelaron a la revista Rolling Stone que se evalúa una “invasión suave” a México.

Se dijo entonces que la estrategia para erradicar el tráfico de drogas hacia Estados Unidos no contemplaría una ocupación militar convencional, sino que se enfocaría en integrar operaciones encubiertas limitadas, como el despliegue de fuerzas especiales para eliminar a los líderes de los cárteles.

La Ley Contra el Terrorismo de 1996, firmada por el entonces Presidente Bill Clinton, otorga al Presidente en turno de los Estados Unidos la facultad de utilizar “todos los medios necesarios” para combatir a grupos terroristas que representen una amenaza para la seguridad nacional. Esto incluye la posibilidad de realizar operaciones encubiertas e intervenciones militares.

Declarar a los cárteles como organizaciones terroristas también habilitaría al gobierno del vecino país a tomar control de las estructuras económicas relacionadas con estos grupos, para desmantelar sus redes de financiamiento.

Esto representaría un cambio significativo en la política de seguridad entre México y Estados Unidos.

La posible intervención militar en territorio mexicano podría tensar las relaciones bilaterales y generar repercusiones tanto diplomáticas como sociales.

La “invasión suave”, como se manejó en un principio, mantiene un fuerte respaldo por parte del Partido Republicano, incluso entre los sectores más moderados, sin embargo, también ha causado polémica, ya que representa una violación a la soberanía mexicana y plantea riesgos diplomáticos y de seguridad para la región.

La Presidenta Claudia Sheinbaum dijo este domingo 22 de diciembre que no aceptará injerencias en nuestro país. Habló de colaboración, de coordinación, de trabajo conjunto, pero, dijo, “nunca nos vamos a subordinar”. Resaltó que México es un país libre, soberano, independiente y que no aceptamos injerencia del exterior.

A pesar de que Trump y Sheinbaum han dialogado, el Presidente electo de Estados Unidos sigue lanzando amenazas y nuestra Presidenta, cabe mencionar, se ha mantenido firme y ecuánime ante estas embestidas.

El reto es que México pueda sostener una contra narrativa efectiva en el largo plazo. Hasta ahora las reacciones han sido aceptables. Pero más allá de las declaraciones, México debe demostrar con acciones que ya dejó atrás los abrazos y que está implementando una estrategia, construyendo la paz y atendiendo las causas.

En definitiva, por el bien de todos, lo mejor sería que comience a notarse un cambio de aquí al próximo 20 de enero. Soy Gregorio Martínez, Más Allá de la Noticia. Nos vemos y nos escuchamos.

Aquí en POSTA.

Comparte esta nota Copiar Liga
URL copiada al portapapeles
Otras Noticias