¡Por fin! Regresó a Venezuela migrante que cruzaba a EUA cuando su hijo murió
La historia de este migrante la difundió POSTA, cuando en medio de la alegría por obtener una cita con migración, Adrián se enteró que su hijo había fallecido víctima de leucemia.
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CIUDAD DE MÉXICO.- Pasó las últimas 24 horas en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, con la incertidumbre de si se iba a poder subir a un avión para regresar a su casa, porque no tiene dinero. Y la fortuna le permitió recibir su pase de abordar, para regresar en una aerolínea venezolana y encontrarse con su familia.
Esa reunión es la que siempre quiso tener Adrián desde que dejó su tierra natal, pero no en estas circunstancias, porque él salió de Venezuela para trabajar y ganar dinero que le permitiera pagarle un tratamiento médico a su hijo que padecía de leucemia, pero que lamentablemente murió y fue informado unos instantes antes de entrevistarse con autoridades migratorias que ya habían agilizado el trámite para que él pudiera ingresar y trabajar legalmente en Oklahoma
Cuando esa tragedia parecía ser la mayor que enfrentaría, no pudo regresar al funeral de su hijo porque la aerolínea en la que le compraron su pasaje no respetó la documentación que le dieron autoridades migratorias mexicanas para regresar a Venezuela y desde entonces se encontraba en espera de un milagro.
Lo logré, Lo hice. Gracias a Dios porque fue una pesadilla, un infierno.
Pero finalmente la suerte le cambió y gracias a las autoridades consulares venezolanas, que lo atendieron en ciudad de México, pudieron coordinar su regreso en un vuelo humanitario directo a Caracas.
Yo fui para la embajada de Venezuela y pedí apoyo, vieron mi caso y llamaron para Venezuela y comprobaron el entierro de mi niño.
Platico nuevamente con POSTA a solo unos minutos de abordar el avión y por supuesto que sonreía al saber que estaba a unas horas de regresar con su esposa, su hija, su madre y el resto de su familia, pero reconoce que es alegría la nubla el hecho de saber que su pequeño Yosuar ya no estará, pero él piensa pasar varios días en el cementerio acompañándolo.
A la misma vez me siento alegre porque voy a abordar el avión y el tiempo me siento apagado porque no voy a conseguir lo que quería más en la vida, mi bebé.
Al mismo tiempo nos dijo que desde su perspectiva y a pesar de haber logrado lo que es muy pocos en la frontera para poder cruzar a los Estados Unidos, el sueño americano no existe y es más bien una pesadilla la que afrontan todos los migrantes tratando de llegar a la unión americana. Hoy piensa que no hay mejor lugar que su tierra, que no hay mejor comida que las arepas o el espagueti con sardina con la que lo esperan y además el amor que a pesar de la adversidad económica le ayudará a pasar estos momentos difíciles, que jamás pensó que le tocaría vivir.
Ahora empieza una vida nueva y sueño con mi familia. Me están esperando en el aeropuerto con pancartas y todo.
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Migrante venezolano pide ayuda para regresar a su país tras la muerte de su hijo